La Alhambra de Granada, una maravilla del mundo

La Alhambra de Granada es uno de los lugares más increíbles que tenemos en España, tanto por su grandeza como por toda la historia que ha vivido durante los siglos que lleva en pie. Sin duda es una maravilla arquitectónica la mires por donde la mires, y es que su mezcla de jardines y palacios, patios, fuentes, miradores es algo inigualable. Es uno de esos lugares del mundo que no puedes dejar de ver al menos una vez en la vida.

La Alhambra tiene dos partes principales: La Ciudad Palatina y El Generalife, y un elemento en común, el agua.

Se trata de la única Ciudad Palatina de época islámica que se conserva en la actualidad, aunque de los seis palacios y dos torres-palacios que albergaba tan sólo quedan en pie el de Comares y el de Los Leones. En el interior de esta ciudad encontramos impresionantes edificios como:

La Alcazaba, que en su día fue la fortaleza encargada de proteger todo el complejo de palacios, y que es el edificio más antiguo de toda la Alhambra. En su interior se encuentra una pequeña ciudad donde se alojaban las tropas. Allí tenemos las famosas Torre del Cubo y Torre de la Vela, entre otras, y el Jardín de los Adarves, desde el que se tienen muy buenas vistas.

Los Palacios Nazaríes, que para mi son lo más bonito de toda la Alhambra, por el conjunto de sus patios, columnas, techos y la increíble decoración en yeso o azulejos de sus paredes. Todo un complejo de pasillos, puertas y patios que conectan unas zonas con otras y que convierten la visita en un espectáculo que no deja de sorprendente a cada paso.

La salas que encontramos en el interior de los palacios son la de los Mocarabes, El Mexuar y el Oratorio, la Sala de la Barca, el Baño de Comares, el Salón de los Embajadores, la Sala de los Abencerrajes, la de los Reyes, la de Ajimeces, Sala de las Dos Hermanas, las Habitaciones de Carlos V, el Mirador de Daraxa, el Peinador de la Reina, el Patio de la Lindaraja o el Patio de la Reja. A cada cual más bonita.

Luego tenemos el Patio de Comares o de los Arrayanes, donde la Acequia que lo atraviesa con su agua típicamente verdosa hace un efecto de espejo que minimiza la horizontalidad del patio.

El Patio de los Leones, recientemente abierto al público tras una restauración que los ha devuelto a su estado original, aunque sobre esto hay opiniones para todos los gustos pues han quedado muy blancos y relucientes, tanto los leones como todo el patio, dando la sensación de que es una obra nueva que desentona con todo el conjunto.

El Partal son los restos del Palacio del Sultán Yusuf III. En esta zona encontramos el Pórtico del Palacio, el Paseo de las Torres donde están la Torre de los Picos, la de las Infantas y la de la Cautiva, que en su día fueron residencias de personas de clase alta que vivían junto a los palacios; y los jardines y paseos que junto a otra lámina de agua conforman todo el conjunto y dan una idea del tipo de vida que llevaban los dirigentes en aquella época.

Y por último, el edificio que menos me gusta de la Alhambra, seguramente por la falta de sintonía con el resto del lugar, es el Palacio de Carlos V. Es una opinión muy personal, tal vez este edificio en otro sitio me parecería una maravilla, pues es bastante peculiar con sus forma cuadrada por fuera y redonda por dentro, pero tras ver los maravillosos jardines y la preciosa decoración de los Palacios Nazaríes, llegar al sobrio palacio de Carlos V resulta decepcionante.

En la segunda zona de la Alhambra está El Generalife, que en su día fue una villa rodeada de bonitos jardines ornamentales y huertos que usaban los reyes musulmanes de Granada como lugar de descanso, y está construido fuera de las murallas de la Alhambra. Si los Palacios de la Alhambra y sus patios y jardines no dejan indiferentes a nadie, los del Generalife no se quedan cortos.

Son muy llamativos los jardines, tanto los Jardines Altos como los Jardines Bajos, además del Paseo de las Adelfas y el Paseo de los Cipreses. También los patios que hay junto al Palacio del Generalife y el Mirador Romántico. El más famoso y tal vez uno de los lugares más fotografiados de toda la Alhambra es el Patio de la Acequia, y luego está el Patio del Ciprés de la Sultana y la bonita Escalera del Agua. Mires donde mires te encontrarás con detalles sorprendentes.

Como dije anteriormente, todo gira en torno al agua. Fuentes, láminas de agua que actúan como espejos, acequias, y hasta barandillas por donde circula el agua junto a la escalera.

La entrada general a la Alhambra cuesta 15,40€ y es muy recomendable comprarla anticipadamente y con bastante tiempo de antelación a través de internet para evitar colas y poder seleccionar la hora de entrada a los Palacios Nazaríes, a los que tan sólo se puede acceder una vez ya que su aforo es limitado. El resto del recinto es de visita libre.

También hay otro tipo de entradas que pueden resultar interesantes, como las entradas nocturnas en las que disfrutar de estos edificios y jardines iluminados y con el cielo estrellado como fondo ha de ser una pasada.

Y la última recomendación, si vais a hacer una escapada a Granada para conocer La Alhambra y otras maravillas de esta ciudad andaluza y buscáis alojamiento, podéis reservar a través de Venere, un portal donde encontraréis hoteles, B&B y apartamentos.

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