El pasado fin de semana estuve en el Castillo de Belmonte, en la provincia de Cuenca, con motivo de los entrenamientos de la Selección Española de Combate Medieval que se realizan en el castillo como preparación para el Campeonato Mundial de Combate Medieval que se celebrará el próximo mes de mayo. Este castillo, que ya visité hace dos veranos y sobre el que aún no había hablado por aquí, es una de las fortalezas mejor conservadas que he visto y una visita muy recomendable para cualquier persona amante de lo medieval, los castillos, la historia y la cultura.
Fue construido por D. Juan Pacheco, I Marqués de Villena, en el siglo XV, y tras una importante restauración reabrió sus puertas al público en julio de 2010. En la zona, además, se pueden visitar los famosos molinos del Quijote por lo que es ideal para una escapada de fin de semana o para pasar el día bastante cerca de Madrid.
El patio de armas del Castillo de Belmonte es el lugar donde el segundo fin de semana de cada mes se entrena la Selección Española de Combate Medieval. Pero entre los días 1 al 4 de mayo, fechas en las que se celebrará el Mundial, se montará un campamento medieval en el recinto amurallado que hay a los pies del castillo en dirección a la población donde todos los equipos convivirán durante unos días ataviados con indumentaria de los siglos XIV y XV. Además habrá un mercado de artesanía y comida medieval, y actividades diversas para quien quiera asistir.
¿Pero qué es eso del Combate Medieval? Pues bien, se trata de un deporte relativamente nuevo, especialmente en nuestro país, y que consiste, en pocas palabras, en un grupo de personas que se visten con armaduras como las que se usaban hace siglos y se lían a patadas, golpes y espadazos.
Y mejor explicado, resulta un deporte de lo más interesante en el que sí se dan golpes y patadas, pero bajo unas normas y controles bastante estrictos, en el que se premia la fuerza pero también la técnica, y donde gana quien logra mantenerse en pie, por lo que el objetivo no es dañar al adversario sino derribarlo. Existen varias modalidades de combate entre las que podemos encontrar duelos, dos contra uno, grupos de 5 contra 5, y hasta de 16. También hay mujeres que pueden pelear en igualdad de condiciones que los hombres.
Este deporte tiene su origen en los torneos medievales que se celebraban en Europa durante los siglos XIV y XV. Hace unos 20 años que comenzó a practicarse de nuevo en países de Europa del Este, especialmente en Rusia, y ahora se está extendiendo por todo el mundo, incluido España donde se practica desde hace un par de años gracias a Cristian Bernal, el capitán de la Selección Española.
Hay que estar en muy buena forma física para practicarlo pues, además de la pelea en sí, los luchadores han de soportar el peso de la armadura que puede estar en torno a los 30 o 40 kilos. Al final de cada asalto, que dura un minuto, pudimos comprobar como acababan exhaustos por el esfuerzo. Por suerte, además de luchadores hay aguadoras y escuderas que se encargan de ayudar a colocar las armaduras y refrescar a los luchadores entre asalto y asalto.
Las armas utilizadas son reales aunque sin filo. Un comité se encarga de verificar que todo lo empleado en la lucha se ajusta a las normas de seguridad y corresponden a lo utilizado en la época correspondiente. Algunas de las pocas normas que tiene este deporte es que no se pueden dar estocadas pues aunque la armadura es de acero y debería soportar el impacto, es complicado garantizar la total protección del luchador en todas las situaciones. Por lo demás, se permiten golpes de todo tipo, patadas, puñetazos, empujones y cualquier cosa que pueda hacer caer al contrincante.
Los combates por grupos son los más espectaculares ya que van varios a por un contrincante o se enzarzan en una melé donde es complicado saber quien logrará salir victorioso. Hay un perímetro de seguridad pues es fácil que salga algún luchador por los aires saltando las vallas que delimitan el espacio donde se lucha, o incluso algún arma. Seguro que durante el Campeonato Mundial, con toda la tensión que habrá durante esos combates, será cuando más llamativo sea.
“No es un juego… es deporte!!”
Más información en la web del Castillo de Belmonte.
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4 Comments
Jexweber
Un gran descubrimiento para mi este deporte, dan ganas de forjarse una armadura y liarse a espadazos para liberar estres…
Victor Ferrando
Jajaja, la verdad es que sí, aunque creo que a mi me desmontan al primer empujón 😀
Edu & Eri
Un placer haber compartido ese día contigo 😀
Victor Ferrando
Igualmente! Hacía tiempo que no nos veíamos y eso no puede ser 😀