Resumen personal, viajero y fotográfico de 2014

No queda apenas nada para que termine 2014, otro año de altibajos, con algunas temporadas en las que apenas he podido salir de casa y otras en las que no he parado de hacer escapadas casi todos los fines de semana. Pero no me puedo quejar.

A finales de 2013 hice mi resumen anual y en él dije que para este año no diría qué quiero hacer o a dónde quiero viajar, para no crear ni crearme expectativas, sino dejar que todo fuera surgiendo de forma natural. Ahora voy a hacer lo mismo, aunque en esta ocasión sí tengo alguna idea clara de lo que quiero para el 2015, que ya desvelaré cuando llegue el momento de hacerlo.

Como ya viene siendo habitual, aquí va un pequeño resumen de lo mucho que he podido conocer y fotografiar este año:

El 2014 empezó fuerte. Fui invitado a pasar cuatro días conociendo Palma de Mallorca en invierno junto con un buen grupo de bloggers a los que ya conocía de otros eventos anteriores. La idea era enseñarnos que en Palma hay mucho más que turismo de playa y fiesta por lo que nos llevaron a conocer su espectacular catedral que se ha convertido en una de mis preferidas, al teatro, a museos como Es Baluard, la Fundación Pilar y Joan Miró, y restaurantes como el Patrón Lunares, Es Rebost o el Club Tast.

También descubrimos su bonito Castillo de Bellver, la vida de su centro urbano y las fiestas de Sant Sebastià, que vivimos en primera persona metiéndonos en medio del Correfoc y cenando una torrà en la calle como el resto de la población.

Pero también aproveché la estancia en la isla para ir a conocer Sa Calobra y el Torrent de Paréis, lugar impresionante al que se llega tras recorrer una carretera con interminables curvas, una de ellas de 180 grados.

Poco después llegó Fitur, la famosa Feria Internacional de Turismo de Madrid a la que acudí por segundo año consecutivo como blogger y que en esta ocasión me pareció algo menos interesante, supongo que debido a que fui sin ningún planteamiento de negocio, pero a la que pienso volver en 2015.

Llegó el mes de febrero y con el una nueva escapada. Tras mucho tiempo deseando volver a Barcelona, ciudad en la que ya había estado varias veces años atrás, y varios intentos fallidos en los últimos años, por fin podía pasar tres días allí. Pude fotografiar la Sagrada Familia, la Casa Batlló, barrios como el Gótico y el Raval, el Park Güell, o el colorido y lleno de vida Mercado de la Boquería.

Tras tres intensos días en la Ciudad Condal fuimos a Girona, otra ciudad que me encanta para perderme callejeando y buscando detalles en sus fachadas, para acabar recorriendo sus murallas y viendo una maravillosa puesta de sol desde lo más alto de estas.

Y aprovechamos la escapada para visitar bonitos pueblos como Palamós, Besalú, Castellfollit de la Roca, volver al Museo Dalí, y pasar un día en la nieve en el bonito Valle de Nuria.

Con la llegada de la primavera conseguí algo que llevaba cuatro años intentando sin éxito: fotografiar los almendros en flor en el Parque de la Quinta de los Molinos de Madrid.

Y luego tocaba seguir cumpliendo con destinos que tenía pendientes, para ello pusimos rumbo al Valle del Jerte, que pillamos en plena explosión de sus blancos cerezos. También aprovechamos para ir a pueblos como Garganta la Olla y Plasencia, además de conocer el Cementerio Alemán de Cuacos de Yuste.

Poco después me invitaron al espectacular Castillo de Belmonte para presenciar los entrenamientos del Mundial de Combate Medieval, lástima no haber podido ir a la final!

En abril volví a Barcelona en un viaje exprés con motivo del Salón Internacional de Turismo de Cataluña. Tan sólo estuve el sábado en esta feria que no me aportó mucho, el domingo preferí hacer algo mucho más provechoso como pasar la mañana fotografiando Montjuic, montando en su teleférico y disfrutando con sus increíbles vistas a la ciudad.

En Semana Santa pasamos cuatro días en Cantabria. Durante este fin de semana, además de pasar un día en Santander dando un paseo por la ciudad y la Península de la Magdalena, fuimos al nacimiento del Río Asón, Santoña, Laredo, Santillana del Mar, Castro Urdiales, y vimos una de las mejores puestas de sol del Cantabrico en Liencres.

De vuelta a Madrid dimos un pequeño rodeo para pasar un día en Bilbao bajo la lluvia, fotografiando los bonitos colores de una ciudad que siempre ha tenido fama de ser gris, aunque en esta ocasión el gris tan sólo lo encontramos en el cielo.

En el mes de mayo llegaba uno de los eventos más esperados del año: el Travel Blogger Meeting que en esta ocasión se celebraba en la ciudad de Gijón. Era la excusa perfecta para conocer algo de Asturias y de reencontrarme con un montón de bloggers buenos amigos a los que normalmente solo puedo ver en estos acontecimientos. Además de hacer un interesante PhotoWalk recorriendo las calles de Gijón, pude conocer el Valle del Río Infierno y los horreos de Espinaredo, algunos pueblos costeros, la Rula de Aviles, y uno de los lugares donde se fabrica la famosa sidra asturiana: Llagar Trabanco.

Este año también ha sido el de la creación de Madrid Travel Bloggers, la asociación de bloggers de viaje de Madrid en la que yo inicialmente participé muy activamente aunque poco a poco he ido dejándola de lado sobre todo por exceso de trabajo. Durante el mes de mayo hicimos un PhotoWalk en el barrio de Lavapiés organizado por Antonio Quinzán y yo, en el que participaron varios de los miembros de MadTB y que esperamos repetir en 2015.

Por si fuera poco, también pasamos unos días en Valencia, donde pasamos un día casi entero en la Ciudad de las Ciencias, conociendo el Museo de las Ciencias Príncipe Felipe y el Oceanografic. Luego bajamos por la costa hacia el Cabo de la Nao, Moraira, Benidorm, Alicante y Santa Pola.

En junio fuimos a Patones de Arriba, uno de los pueblos más bonitos de Madrid y que, para mi gusto, debería estar también en cualquier lista de los pueblos más bonitos de España.

También llegaron más blogtrips:

El primero a Aranda de Duero, donde nos pusimos las botas comiendo en las Jornadas Gastronómicas del Lechazo, y conociendo el pueblo.

Y el segundo, que me llevó de nuevo a una isla. En esta ocasión tocaba ir a Tenerife, un destino del que me enamoré en cuanto llegamos a las Cañadas del Teide. Además el pequeño grupo que fuimos, compuesto por Chefi, Ana, Álvaro y yo acabamos pasándolo en grande.

Aparte del Teide conocimos pueblos como La Orotava y Puerto de la Cruz, las playas de Adeje, el Barranco de Masca, los Acantilados de los Gigantes, ballenas en el océano, la vía lactea desde el Parador del Teide, sus tradiciones, y participamos en la Romería en honor a San Isidro.

Ya en agosto volvimos unos días a Valencia. Sabíamos que durante una temporada íbamos a tener que parar las escapadas pues llegaba gran cantidad de trabajo, así que fue nuestro pequeño momento de relax.

Durante el mes de septiembre apenas salimos de Madrid, aprovechamos para hacer algunas fotos por el centro y conocer la Catedral de la Almudena, cuyo interior fue una grata sorpresa, y comenzamos a conocer nuevos restaurantes de la capital, pero sin dejar de ir a comer las mejores hamburguesas de Madrid.

Pero no fue hasta octubre que pude salir por fin de Madrid. Gracias a la empresa Siempre en las Nubes fui a volar en globo sobre Salamanca en lo que se ha convertido en una de las experiencias más interesantes de todo el año. Ver la ciudad desde las alturas es una pasada.

En noviembre hicimos algo más de turismo por Madrid, visitando el Jardín Botánico en otoño y volviendo a comer a Patones de Arriba. Definitivamente me encanta este pueblo!.

Más tarde fuimos a Villatoya, un pequeño pueblo de la provincia de Albacete, casi lindando con la de Valencia, a pasar un fin de semana en unas cabaña rural y disfrutar del Balneario Baños de la Concepción. Aprovechamos el fin de semana para pasear por la orilla del bonito Río Cabriel, volver a visitar Alcalá del Júcar, y ya de vuelta a Madrid para conocer el pueblo de Alarcón, en la provincia de Cuenca.

Y para terminar, con diciembre llegó el gran viaje del año. Aún no he tenido casi ni tiempo de ver las miles de fotos que he hecho en República Dominicana, New York, Las Vegas y San Francisco durante tres intensas semanas en las que he cumplido algunos de mis sueños viajeros, como son pasear por el Brooklyn Bridge, ver atardecer en Central Park, conocer la Estatua de la Libertad, visitar los más conocidos casinos de Las Vegas, sobrevolar el Gran Cañón del Colorado en helicóptero, entrar en la prisión de Alcatraz y ver el Golden Gate (aunque tuvo que ser desde lejos), adentrarme en el Parque Nacional de Los Haitises o bañarme en una paradisiaca playa del Caribe.

Mi resumen personal de 2014

Personalmente el año ha sido muy movido, tanto a nivel personal como laboral, creo que he mejorado muchas cosas y he aprendido bastante de los problemas que han ido surgiendo.

Sobre viajes ya se ve que no ha ido nada mal, me quedo sobre todo con la satisfacción de haber cumplido algunos de mis sueños y de haber intentado conocer esos destinos desde un punto de vista más personal y menos turístico.

Y las fotos muestran lo que he aprendido este año, cada vez fotografío menos paisajes y calles vacías, sin perder mis principios y mis ideas pero buscando aquello que da vida a las fotografías. He aprendido que en muchas ocasiones incorporar personas a las fotografías, y ahora espero a que se pongan en el punto exacto que yo quiero en lugar de esperar a que se aparten de la escena que quiero fotografiar. Y sobre todo he aprendido que no todo son fotos, se puede disfrutar de un lugar sin la obligación auto impuesta de tener que traer un reportaje fotográfico para el blog, y así se disfruta más, tanto del destino como de las fotos que se hacen en él.

2015 es un año en el que espero se sigan cumpliendo mis sueños, pero también en el que quiero iniciar varios proyectos personales que espero sean importantes en mi vida, y que marcarán tanto mi tiempo libre como mis futuros viajes. De entrada ya tengo casi asumido que no viajaré en los primeros meses del año, y me duele decir esto pero en ocasiones hay que sacrificar algunas cosas para conseguir otras. Para el blog, además, quiero un nuevo diseño, reestructurar los contenidos y dar un nuevo enfoque a algunas cosas, centrándome un poco más en el aspecto fotográfico, pero también en el personal.

A pesar de todo, estoy convencido de que cuando dentro de un año esté escribiendo mi resumen anual, no faltarán fotos, ni destinos visitados, tanto dentro de España como fuera de nuestras fronteras, y espero que si estás leyendo esto, me acompañes durante estos doce meses.

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