El Parque o Jardín del Capricho es, para mi gusto, uno de los mejores espacios verdes que se pueden encontrar en la ciudad de Madrid, sin embargo, aunque cada vez menos, es un gran desconocido para gran parte de la población que habita la ciudad, tal vez porque a pesar de estar dentro de los límites la ciudad, queda bastante apartado del centro y otros tan famosos como el Parque del Retiro acaparan la visita de locales y turistas.
La entrada al Parque del Capricho es gratuíta, aunque el aforo es limitado. Conviene enterarse bien del horario pues según la época del año varía la hora de cierre, además de lunes a viernes está cerrado. A pesar de todo esto, es mucho más que recomendable visitarlo en cualquier época del año. En primavera por la cantidad de flores que crecen y llenan de vida y color los jardines. En verano pues la vegetación, los lagos y la humedad sobre todo por la tarde cuando riegan, reducen la sensación de calor que se tiene en las calles del centro. En otoño con los maravillosos colores amarillos y rojizos que tiñen gran parte de los árboles que pueblan el jardín. Y en invierno, tal vez la época menos bonita, pero también tiene su encanto para dar un paseo por los caminos y praderas.
Se encuentra en la Alameda de Osuna, junto al Parque Juan Carlos Primero. Es un lugar ideal para respirar un poco de aire puro sin salir de la ciudad, relajarse y perderse por sus caminos rodeados de frondosa vegetación, buscar inspiración para escribir, pintar o fotografiar. También para disfrutar de un rato en familia, o para pasear con la pareja por muchos de sus románticos rincones.
Los caprichos del Parque del Capricho:
La Casa de la Vieja
El Casino de Baile
El Lago
El abejero
El templete de Baco
El palacio
El Paseo de los Duelistas
La Plaza de los Emperadores
La Exedra
La fuente de las ranas
El Fortín
El laberinto
Jardín de Flores
Historia del Parque del Capricho:
En el año 1783, Doña María Josefa de la Soledad Alonso Pimentel y Téllez Girón, Condesa de Benavente y Duquesa de Osuna, casada con Pedro Téllez Girón, IX Duque de Osuna, compra una finca de catorce hectáreas con el principal fin de salir de la gran ciudad y dar rienda suelta a sus inquietudes artísticas y culturales. Fue considerada como una de las mujeres más inteligentes de su época, mecenas de artistas y toreros, sentía junto con su marido verdadera pasión por cualquier cosa que tuviera relación con las artes y las ciencias.
El arquitecto Pablo Bouteleu, un año después de la compra, presentó el proyecto inicial para el jardín, que comenzó a construirse en 1787 y cuyas obras se prolongaron durante 52 años. La duquesa falleció en el año 1839 sin ver completamente terminada su obra.
Los jardines fueron diseñados por el arquitecto francés Jean-Baptiste Mulot, quien ideó una serie de zonas diferenciadas: el parterre o jardín francés, el paisajista inglés y el giardino italiano.
Se construyeron estanques y canales navegables que conectaban distintas zonas y edificios, además hizo plantar miles de ejemplares de su flor favorita, la lila.
Durante la invasión francesa de 1808 el recinto del Parque del Capricho pasa a ser propiedad del general francés Agustín Belliard, quien utilizó las instalaciones para sus tropas, volviendo a manos de la duquesa tras la retirada de los franceses, momento en el que decidió realizar una reforma completa del sitio construyendo el casino de baile y el palacio. También se levantaron columnas y relieves representando las cuatro estaciones: primavera, verano, otoño e invierno.
Tras la muerte de la duquesa, la propiedad pasa a manos de su nieto, Pedro Alcántara, quien encarga a Martín Lopez de Aguado, autor del casino y el palacio, la construcción de la Exedra en honor a su abuela en la Plaza de los Emperadores. Tras su muerte, es cedido a su hermano, un derrochador de carácter excéntrico que malgasta la fortuna familiar y termina perdiendo la propiedad, siendo subastado en el año 1882.
Durante la República, el Parque del Capricho fue declarado Jardín Histórico, aunque esto no logró que continuara degradándose, por lo que durante la Guerra Civil se utilizó como Cuartel General del Ejército del Centro, construyéndose en el varios refugios antiaéreos subterráneos, de los que aún se pueden ver los respiraderos junto al palacio.
Tras varias décadas de abandono, en 1974 el Ayuntamiento de Madrid compró el Parque del Capricho, en 1985 fue declarado Bien de Interés Cultural y un año más tarde comenzó una reforma que permitió abrirlo al público en el año 1999, aunque la reforma en cierta medida continua en la actualidad ya que se estudia recuperar otras zonas.
El Búnker oculto en el Parque del Capricho
El Búnker del Capricho, cuyo nombre original fue Búnker de la Posición Jaca, ha sido abierto al público recientemente. Tras un minucioso trabajo de rehabilitación y adecuación, el Ayuntamiento de Madrid ha cumplido con una reivindicación vecinal para que esta joya de la historia de la ciudad pueda ser visitada.
Esta apertura del Búnker del Capricho ha propiciado que la afluencia de visitantes al parque se multiplique en 2016. Puesto que el aforo del Parque del Capricho es limitado, y tan sólo abre los fines de semana en un horario reducido, visitar el búnker se ha convertido en una misión complicada.
Para visitar el Búnker del Capricho hay que reservar con bastante antelación, incluso más de un mes.
Puedes ver más fotos del Parque del Capricho en la galería de Flickr
Información para visitar el Parque del Capricho
Horario: Depende de la época del año. Consultar en la Web del sitio.
Precio entrada: Gratuita.
Duración mínima visita: Una hora.
Dirección: Alameda de Osuna, Madrid.
Aparcamiento: Fácil y gratis.
Valoración: Imprescindible.
18 Comments
La Mochilade Mamá
Es un parque precioso!! Un imprescindible para aquellos viajeros que visitan Madrid con algo de tiempo extra!!
Preciosas las fotos también!!
Un abrazo,
Marta A.
Victor Ferrando
Sí lo es, a mi me encanta ir especialmente en las calurosas tardes de verano. Te olvidas del ruido y del calor completamente! Uno de mis sitios preferidos de Madrid.
Muchas gracias por pasar por aquí, me alegra que te guste 🙂
Un abrazo.
Aran
Mira que lo tengo al lado de casa como aquel que dice y aún no he ido! Parece que a veces por tener cerca las cosas se les da menos importancia y nos empeñamos en viajar lejos, cuando al lado tenemos verdaderas preciosidades.
Ahora ya conozco un poco más el parque para cuando vaya 🙂 Un saludo!
Victor Ferrando
Suele pasar, en mi caso ahora que estoy lejos de mi tierra (Valencia), cada vez que voy descubro sitios increibles que desconocía y que durante años no supe apreciar. Viajar lejos está bien, por conocer otras culturas, tradiciones, costumbres… pero tambien hay que conocer los sitios que tenemos cerca!
Pásate cualquier finde a dar un paseo por el parque, no te dejará indiferente.
Un saludo 🙂
alejandra castro (@alejama66)
hermoso parque y magnificas fotos
Victor Ferrando
Muchas gracias! Tengo ganas de volver, antes iba muy a menudo y ahora lo tengo un poco olvidado, pero es de lo mejor de Madrid 🙂
Juan Novakosky
Guapísimo el parque y las fotos Victor. Me recuerda al parque del laberinto de Horta en Barcelona, aunque este parece mucho más grande. Una buena visita si algún día voy por Madrid.
Un saludo,
Victor Ferrando
Muchas gracias Juan! La verdad es que El Capricho es un lugar fantástico que no puede faltar en cualquier visita a Madrid, siempre que se tenga algo de tiempo. No conozco el parque que comentas en Bcn, pero lo apunto a la lista de lugares para ver cuando vuelva por allí. Un saludo!
Artabria
Muy buenas fotos, como siempre. Me encantan los colores del otoño, tienen algo especial!
Victor Ferrando
La verdad es que las épocas que más me gustan, por los colores, son primavera y otoño, el parque está espectacular en esas dos estaciones, pero aun sin ser tan colorido es muy bonito en las otras dos 🙂
Muchas gracias! 🙂
Anna
Nosotros lo visitamos el año pasado en pleno invierno y el agua de algunas fuentes estaba helada! Tenemos ganas de volver en primavera para ver algo de flor.
Saludos!
Victor Ferrando
Pues ya no queda nada para primavera! Es una explosión de color que merece la pena ver. Yo nunca lo he visto helado, y eso que he ido veces, jeje, esta vez las fuentes estaban sin agua.
Saludos! 🙂
Edu y Eri
El horario es bastante restringido, aunque lejos de ser un problema es el causante de que se pueda disfrutar del parque en silencio y sin aglomeraciones. Uno de nuestros sitios favoritos de Madrid 🙂
Victor Ferrando
Totalmente de acuerdo, por el horario y por que no pueden entrar más de 1.000 personas. Nunca lo he encontrado lleno, pero sí me ha pasado de ir y que estuviera cerrado. Es ideal para ir a pasear, relajarse, pensar, inspirarse…
Saludos! 🙂
Félix Bernet
Estupendo reportaje. Es una de las visitas que tengo pendientes, despues de tu post, no se si me dan más ganas de ir, o lo contrario, ya que me lo has mostrado todo.
Haciendome muy fan de tu blog y tus fotos
Victor Ferrando
Espero que te hayan incrementado las ganas de ir, y que vayas. Seguro que allí harás muy buenas fotos.
Muchas gracias Félix! 🙂
Pingback: El desconocido Parque El Capricho reclama su sitio en Madrid | Mundo Aparte
Lorenzo Cabezuelo Chumillas
Estuve el otro día, para hacer algunas fotos, fui a primerísima hora y vi conejos, ardillas y muchos animalitos, las fotos son preciosas me esperan otros días para un trabajo de fotografía especial, merece muuuuuuuuuuuucho la pena visitar sin prisa.