Hacía mucho tiempo que quería visitar Aranda de Duero. Se trata del típico pueblo que siempre pilla de paso cuando voy hacia el norte desde Madrid. Siempre que me planteaba una escapada de un día estaba entre los posibles candidatos pues está a poco más de hora y media de distancia, y mucha gente me había dicho que, aparte de ser bonito, se come muy bien. Este es un gran punto a su favor. Pero no ha sido hasta hace dos fines de semana que he tenido la oportunidad de conocerlo gracias a una visita en compañía de otros bloggers de viajes y gastronómicos con motivo de las XIV Jornadas Gastronómicas del Lechazo Asado, de las que ya os hablé en el anterior artículo, y que se celebran todos los años en Aranda de Duero durante el mes de junio.
El lechazo y el vino obviamente estaban deliciosos. Pero también aprovechamos el viaje para conocer los muchos atractivos culturales e históricos que tiene el pueblo.
Las Edades del Hombre en Aranda de Duero
Nada más llegar fuimos directos a ver uno de los eventos culturales de arte sacro más importantes a nivel nacional e internacional: la XIX edición de Las Edades del Hombre con la exposición Eucharistía. Esta exposición, que tiene como sedes las Iglesias de Santa María la Real y la Iglesia de San Juan, se inauguró el pasado mes de mayo y se podrá visitar hasta el 10 de Noviembre de 2014.
Las Jornadas del Lechazo
Después de la visita guiada a la exposición teníamos hambre y ganas de probar el famoso Lechazo Asado. Para ello fuimos al Asador Lagar de Isilla. Allí comimos un menú especial de las Jornadas del Lechazo. Este menú tiene un precio de 37€. El menú incluye como entrantes Sopa de Tomate asado con Manitas de lechazo, Mini Cupcake de Lechazo con espuma de Foie y Mango, Langostino relleno de guiso de Mollejas con salsa de soja, Cocktail de lenguas de Lechazo escabechadas, y Timbal de Riñones de Lechazo con puré de patata de asado y queso. El plato principal es, por supuesto, un cuarto de Lechazo asado en horno de leña. Viene acompañado de una ensalada de Lechuga de Medina, y como postre un rico Hojaldre relleno de crema y cubierto de nata. Todo ello regado por buen vino de la Denominación de Origen Ribera del Duero.
Qué ver y hacer en Aranda además de comer Lechazo
Tras la comilona bajamos a la bodega subterránea que tiene el propio restaurante. Esta bodega forma parte de las muchas bodegas que pueblan el subsuelo de Aranda.
Bodegas subterráneas
Más tarde pudimos ver otras bodegas como la de Las Ánimas. En Aranda de Duero hay siete kilómetros de bodegas excavadas con picos durante siglos por sus propios habitantes. En la actualidad podemos encontrar en ellas antiguas barricas fabricadas in-situ por los toneleros ya que era imposible bajarlas por las estrechas escaleras que daban paso a las bodegas. También otros elementos antiguos como los pellejos en los que se subía el vino a la superficie o los candiles de aceite que se usaban para iluminarse.
En total son unas 135 bodegas las que se conservan, casi todas de uso privado. Es fácil que durante días festivos algunos habitantes de Aranda se ofrezcan a enseñaros de forma gratuita sus bodegas particulares. Si estás visitando Aranda y te lo ofrecen, te recomiendo aceptar esta invitación. A pesar de que pueda parecer que se trata de más pasadizos iguales, cada bodega tiene elementos diferentes y gratas sorpresas en su interior.
Arquitectura religiosa
Una de las joyas de Aranda es la iglesia de Santa María la Real, construida entre los siglos XV y XVI. También es conocida como la Pequeña Catedral, y no me extraña. Su fachada, que en 2014 ha celebrado su V centenario, y su interior, donde ahora se encuentran las obras de Eucharistía, son espectaculares. Ha sido recientemente restaurada y su retablo puesto en su lugar original. Un imperdible en Aranda.
Y también la Iglesia de San Juan, cuyo origen se remonta al nacimiento de la villa y cuya fachada también ha sido remodelada.
Museos de Aranda
En el museo Casa de las Bolas vimos una exposición de grabados de Dalí. En las calles hay instaladas varias esculturas vanguardistas, algunas de las cuales impresionan. Coincidió con que se estaba celebrando la fiesta del Concilio de Aranda. Además, durante los fines de semana de verano cada peña del pueblo celebra su fiesta, por lo que por donde fuéramos nos encontrábamos con celebraciones y espectáculos de todo tipo.
Una visita Teatralizada por el centro de Aranda de Duero
A las 19:00 horas nos dirigimos a la Plaza Mayor para descubrir algunos de los lugares de interés de Aranda de Duero a través de una visita teatralizada. Una forma diferente de conocer Aranda en la que además de recorrer el pueblo, cuentan con un toque de humor pequeñas historias relacionadas con el nombre de las calles o las casas que se van viendo. Al final se meten de lleno en una disputa histórica acontecida en el año 1503, cuando se elaboró el primer mapa de la localidad.
El recorrido termina en el Puente Románico sobre el Duero, pasando por la Judería y la Iglesia de San Juan entre otros, y tratando de resolver el misterioso mensaje dejado en el mapa por su autor, que decía «En el plano me hallaréis». Estas visitas son gratuitas y se realizan de martes a viernes a las 19.00 horas. Los sábados y domingos las visitas son a las 13.00 y a las 19.00 horas.
Nosotros no paramos de reír, la interacción con los asistentes es continua y los actores improvisan a la perfección ante cualquier situación o comentario. El público miraba atentamente cada detalle.
Otros lugares para comer o cenar en Aranda
Para la cena fuimos al Asador Aitana, donde comimos un rico Melón con Jamón, un Licuado de Tomate con Pimiento relleno de marisco relleno de marisco en frío y alioli del mismo pimiento y cebolla caramelizada, Ensalada de foie laminado, vinagreta de frambuesa y frutas de temporada, Buñuelo de pescado en salsa de almendras con cola de Cigala, y Vieira a la plancha gratinada al horno con salsa de tomate natural y picadito de cebolla y vieira. Y como plato principal un buen Solomillo.
Nada más terminar de cenar, a las doce de la noche, se apagan las luces en la calle donde está Santa María la Real para dar paso a la proyección de un video mapping sobre la fachada de la iglesia, donde se muestran imágenes históricas de Aranda de Duero y del propio templo, que conmemora su quinto centenario.
La Ruta del Vino Ribera del Duero
Aranda de Duero se encuentra dentro de la Ruta del Vino Ribera del Duero, junto a localidades tan conocidas como Peñaranda de Duero, Haza, o Peñafiel. A lo largo y ancho de esta ruta enológica podemos encontrar impresionantes monumentos, castillos, claustros o conventos, además de bonitos paisajes, rica gastronomía y, por supuesto, algunos de los mejores vinos del país.
Uno de los lemas de la localidad es ‘Aranda de Duero, tierra de vino y cordero’. Otros productos gastronómicos típicos de Aranda de Duero son la morcilla dulce arandina y la torta de aceite de Aranda, que pudimos probar en la comida.
¿Dónde está Aranda de Duero?
Aranda de Duero está situado a 161 kilómetros de Madrid, en la Autovía A1 dirección norte.