Toledo es una ciudad que a todos enamora, aunque como cualquier cosa en la vida, es cuestión de gustos, y a mi personalmente no me gustaba mucho, tal vez porque la tenía tan idealizada que me decepcionó. Está claro que pasando unas horas en sus calles no te puedes hacer una idea exacta de lo que es la ciudad, por eso hace unos meses decidí que era el momento de volver para verla con otros ojos. Y sí, admito que es una ciudad bonita, llena de esos detalles que tanto me gusta fotografiar, por la que da gusto caminar tranquilamente empapándose de su encanto, admirando cada rincón, cada fachada, cada ladrillo.
Tal vez la primera vez no estuviera atravesando un buen momento anímico. Tal vez hacía mucho calor. Sea por el motivo que fuera, tenía que darle otra oportunidad, y teniéndola tan cerca de Madrid era cuestión de tiempo que decidiéramos acercarnos a pasar un día.
No se puede negar que la capital de Castilla la Mancha es una gran ciudad, con siglos de historia que han quedado fielmente plasmados en su fisonomía y que han llegado intactos a nuestros tiempos.
Pasear por su judería, con sus empinadas y estrechas callejuelas, dejándote llevar sin rumbo fijo y observando todos los detalles es algo que se ha de vivir. También es muy recomendable bucear por sus numerosas tiendas de artesanía y probar sus dulces típicos, aunque sinceramente creo que nunca compraría una espada.
¿Qué ver en Toledo?
Plaza de Zocodover y Arco de la Sangre
Es el centro neurálgico de la antigua ciudad de Toledo. En su momento se proyectó una plaza enorme que uniera la actual con el Alcázar, pero no llegó a realizarse debido a la complejidad de su ejecución. Una parte fue diseñada por Juan de Herrera, arquitecto que también se encargó de levantar la Catedral de Valladolid o el Escorial. Zocodover viene del árabe y su traducción al castellano sería «mercado de bestias de carga». Atravesando el Arco de la Sangre, bajando por unas escaleras, encontramos una estatua de Miguel de Cervantes.
Pasada la estatua de Cervantes que antes comentamos, llegamos al Convento de Santa Fé, actualmente Museo de Santa Cruz, que alberga las colecciones de los antiguos Museo Arqueológico Provincial y Museo Parroquial de San Vicente. El edificio, construido a primeros del siglo XVI en estilo plateresco, fue originalmente un hospital. Destaca su portada, su patio, y la escalera de acceso a la primera planta, obra de Covarrubias.
La Catedral de Santa María de Toledo o Catedral Primada de España es un edificio de arquitectura gótica construido en piedra blanca entre los siglos XIII y XV, con 120 metros de largo y 60 de ancho. Su fachada principal tiene tres puertas: Puerta del Perdón en el centro, Puerta del Juicio Final a la derecha y Puerta del Infierno a la izquierda, además de una espectacular torre campanario. En los laterales encontramos la Puerta del Reloj, la Puerta de los Leones, y otras tres menos importantes.
Su interior, que no hemos visto al completo ya que la entrada cuesta 7 euros, es, por lo que pudimos intuir y por lo que cuentan, de los más bonitos de España. Además como ya contamos en nuestro post de Granada, su Catedral se inspiró en la de Toledo.
El interior de Santa María la Blanca recuerda a una mezquita, aunque en sus orígenes fue una sinagoga más tarde reconvertida en iglesia cristiana, aunque en ella no se ofician misas. Cuando se construyó, a principios del siglo XIII, fue considerada «la mayor y más hermosa sinagoga de España», de estilo mudéjar, con sus paredes completamente blancas y lisas y 32 pilares con forma octogonal soportando arcos de herradura.
El Monasterio de San Juan de los Reyes, de finales del siglo XV en estilo gótico isabelino, me recuerda en su interior a la Capilla Real de Granada, pues fue mandado construir por los Reyes Católicos y cuenta con sus símbolos, así como el águila de San Juan. Destaca el claustro, considerado una de las joyas españolas del gótico de transición al renacimiento, y los techos de madera mudéjar. Sus fachadas llenas de cadenas también son impresionantes.
El Alcázar está situado en la parte más alta de la ciudad. Originalmente fue un palacio romano, hasta que en el siglo XVI fuera restaurado y modificado por el arquitecto Alonso de Covarrubias. El edificio actual es una reconstrucción reciente del que fuera completamente destruido durante la guerra civil y alberga la Biblioteca de Castilla la Mancha y desde el año 2010 el Museo del Ejercito.
El Puente de Alcántara también tiene su origen en la época romana, aunque ha sido destruido y nuevamente edificado en numerosas ocasiones. Está protegido por dos puertas fortificadas en cada uno de sus extremos, siendo una de ellas de estilo barroco y la otra construida en época medieval.
Toledo era una ciudad amurallada ya en época romana, aunque la actual es de origen árabe y data del siglo X. Se encuentra en muy buen estado de conservación en su gran mayoría.
Además, como toda ciudad amurallada, tiene sus puertas de entrada. Entre las más famosas destacan la Puerta Vieja de Bisagra o Puerta de Alfonso VI, la Puerta Nueva de Bisagra, la Puerta del Sol, la Puerta del Cambrón, y la Puerta del Vado.
Entre los lugares que no dieron tiempo a visitar están la Sinagoga del Tránsito, que alberga el Museo Sefardí, la Mezquita de las Tornerías y el Museo de El Greco
Es recomendable aparcar fuera de las murallas y acceder por cualquiera de las puertas que hemos comentado. También es buena opción subir por las escaleras mecánicas del Recadero y pasear por El Miradero.
Otra de las cosas que recomendamos es salir de la ciudad, por la Ronda del Valle, donde encontramos varios miradores desde los que se obtienen las mejores vistas de la ciudad, imprescindible para aficionados a la fotografía.
Me llama mucho la atención una frase, que vimos repetida en varias placas en las puertas de la ciudad, y que dice lo siguiente:
Son libres de portazgo los vecinos de Toledo y de sus montes y de los lugares de la jurisdicción.
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6 Comments
Marta A.
Toledo es una ciudad preciosa!! Aunque sus cuestas me dan muuuucha rabia!!
Victor Ferrando
Jajaja, las cuestas son parte de su encanto! 😛 He de volver a ver la ciudad con más calma, teniéndola tan cerca es un lugar ideal para ir a pasar el día 🙂
Inma
Muy bonito el reportaje. Aunque creo que, a pesar de que has sabido fotografiarla muy bien en alguno de sus detalles, sigue sin ser una de tus ciudades favoritas. A mí me pasa lo mismo. Enhorabuena por tus otos y tu blog.
Victor Ferrando
Mentiría si dijera que es una de mis ciudades favoritas, pero es cierto que ahora me gusta más que la primera vez que fui, y estoy convencido de que menos que la próxima vez que vaya. Aun así, para mi gusto, a pesar de que tiene sitios muy chulos y pasear cámara en mano es muy interesante, le falta algo…
Muchas gracias, espero que te pases más veces 🙂
miriam
Hola!!
Tengo que reconocer que de las rutas que he leido, esta me parece genial, muy completa por sus detalles en la explicacion y sobre todo al acompañarla con fotografias que nos hacen viajar en el tiempo y hacernos una idea de lo que vamos a encontrar…
Podrias hacer lo mismo, pero en una ruta gastronimica?… o por lo menos algo parecido.
Pues me gustaria pasar 3-4 dias en Toledo o algun pueblecito de alrrededor y no se por donde empezar y a ello me refiero incluso por el alojamiento… jeje:-)
Gracias y saludos,
Victor Ferrando
Hola Miriam,
pues me lo pones difícil, la verdad es que en Toledo sólo he estado dos veces y como digo más arriba en ambas ocasiones fue viaje de ida y vuelta desde Madrid el mismo día, por lo que no conozco hoteles y, sinceramente, no recomendaría donde comí… Para ver Toledo bien, con un par de días tienes suficiente. Tampoco he estado en pueblos cerca, aparte de Aranjuez que está a 45km, así que me temo que poco puedo ayudarte.
Espero que disfrutes de tu estancia allí y que al menos mis fotos e indicaciones te hayan servido de algo. Un saludo.