Empezamos la primera mañana del TBMCatSur haciendo una de las actividades propuestas que para mi gusto podía permitirme hacer muy buenas fotos: El Camí de Ronda. Se trata de uno de los caminos que se pueden encontrar en los alrededores de Tarragona y que se están tratando de conservar y promocionar para que turistas y locales conozcan mejor la historia de la ciudad. Y lo hicimos guiados por una persona que conoce muy bien el tema y la zona: el fotógrafo y geógrafo Rafael López-Monné.
En la antigüedad, los Caminos de Ronda unían las torres de vigilancia que salpicaban las costas para controlar la posible llegada de piratas y corsarios, así como de embarcaciones sospechosas de portar enfermedades contagiosas y peligrosas para la población local.
Recorriendo el Camí de Ronda de Tarragona
El Camí de Ronda es una excursión de algo más de 4 kilómetros que, aunque se puede hacer en cualquier época del año sin ningún problema, está pensada para hacer en invierno, o tal vez primavera u otoño, pues en verano las playas están más pobladas de turistas y el calor algunos días puede llegar a ser sofocante.
Damos comienzo al paseo en la Platja Llarga, o Playa Larga, que como su propio nombre indica es una playa larguísima, en la que hay dos cámpings. El paseo por la arena, casi rozando el Mar Mediterráneo, ahora que hay poca gente, es muy agradable y el sonido de las olas rompiendo relaja hasta al más nervioso.
Tras un rato de caminata llegamos a la Punta de la Creueta, donde se puede elegir entre continuar por la costa, o atravesar por el interior. Nosotros elegimos la segunda opción y dejamos momentaneamente la fina arena para hacer una incursión en una zona boscosa, típica de las costas mediterráneas, que poco a poco va cogiendo altura permitiéndonos en algunos momentos tener unas vistas privilegiadas del mar.
Desde lo alto vemos la Cala Fonda, con el resto del litoral al fondo hasta llegar a la ciudad. Posteriormente el camino atraviesa alguna playa nudista, como la Playa de la RocaPlana, y sigue bordeando la costa hasta llegar a la Torre de la Mora.
En el recorrido del Camí de Ronda encontramos antiguas canteras romanas. La piedra de esta zona era muy apreciada y se utilizó para las construcciones que los romanos llevaron a acabo en la región.
Aquí nos encontramos con un punto problemático pues, según nos cuenta el guía, existe un conflicto entre las administraciones y el Cámping Torre de la Mora, propietario de los terrenos por donde discurre el camino. Existen dos opciones: la primera, más fácil, sería atravesar el cámping, lo que no supone ningún problema por parte de los propietarios o clientes que asumen estar en una zona de paso; la segunda consiste en atravesar una estrecha senda que discurre pegada a un acantilado.
Nosotros optamos por la segunda opción. No es peligrosa pero hay que andar con cuidado y en algún tramo no es apta para personas con movilidad reducida. Lo ideal, según nos explican, sería poder acondicionar esta zona de paso para hacerla más accesible, pero se encuentra dentro de la zona de costa protegida por lo que no se ha podido adecuar. Sin ánimo de polemizar, pienso que es una lástima no poder alcanzar un acuerdo beneficioso para todas las partes, y respetuoso para el medio ambiente.
Tras dejar atrás esta zona llegamos a la Cala de Tamarit, con su imponente castillo pegado al mar. Como curiosidad, en este castillo, que se alquila para celebrar eventos, es donde se casó el jugador de fútbol Iniesta.
El paseo, que debía durar unas dos horas, se alargó hasta las casi cuatro horas entre explicaciones y paradas para realizar cientos de fotos. Y como no podía ser de otra forma, concluyó en una terraza junto a la playa, tomando unas cañas acompañadas de unos ricos mejillones y pulpo.
La vuelta la hicimos en el autobús que la organización del evento puso a nuestra disposición, pero antes conocimos el Cámping Tamarit Park, un lujo de lugar para pasar unos días de relax playero muy cerca de la ciudad, pero a pie de playa, en bonitos bungalows ordenados en torno a plazas.
Para ir desde Tarragona hasta la Playa Larga hay autobuses urbanos, aunque también se puede llegar dando un agradable paseo por la costa.
6 Comments
Marta A.
Madre mía que lugar tan bonito!!! Me cambio ahora mismo por estar en alguna de esas calitas!!!
Victor Ferrando
Jajaja! Ya sabes que yo no soy muy de playa, pero para pasear como hicimos ese día sí me gustan! Yo también me cambio 😀
Robin Jú
Gran post para un precioso paseo. Me alegra mucho haber compartido esa mañana contigo. Un abrazo.
Alfonso
Victor Ferrando
Muchas gracias Alfonso, la verdad es que sí fue un bonito paseo, y en muy buena compañía! Espero que coincidamos en más ocasiones 🙂
Un abrazo.
Lonifasiko
Entretenida ruta con sabor 100% mediterráneo, que además tuvimos la oportunidad de disfrutar de la mano de un excelente guía como Rafael. Destacar también la estupenda cuadrilla de bloggers senderistas, que dieron la talla como campeones y donde hubo muy buen rollo. Veo además que alguno que otro tomó muy buenos apuntes y fotos ;-). SaludoX!
Victor Ferrando
Tan entretenida que se pasó la mañana volando! No hay nada como disfrutar de un sitio bonito, con buena compañía, un gran guía, y acabarlo con unas cañas 😀
Muchas gracias Miguel, hasta la próxima! Saludos.